Ver a un animal que ha sido maltratado y traicionado es algo terrible, algo que me duele en el alma.
Desafortunadamente hay muchos animales que sufren por todo el mundo, y miles de ellos son abandonados en refugios y todo lo que hacen es esperar que alguien les de una segunda oportunidad.
Charlotte Mecklenburg Animal Care & Control (CMACC) en Carolina del Norte en Estados Unidos es uno de estos refugios. Y este es un refugio que Sarah Sleime visita, como voluntaria, de vez en cuando. Así que ella está acostumbrada a ver animales desanimados y qie solo esperan que alguien los adopte.
Incluso ella fue sacudida cuando conoció a Cinnamon, una Pitbull, que parecía tener lágrimas en sus ojos cada vez que Sarah pasaba por ahí. Lo que vendría a aprender sobre el pasado de Cinnamon, sin embargo, la empujaría al límite…
Se supo que Cinnamon tenía 7 años, y parecía que sus dueños antiguos la habían utilizado com perro de cría.
En un mensaje en Facebook, Sarah escribió: «Alguien abandonó a esta pobre mamá en el refugio, menos sus bebés. Cada vez que paraba y hablaba con ella y le decía que lo sentía sus ojos se llenaban de lágrimas. ¡¡Desgarrador!!»
Apelación
Sarah pronto decidió que tenía que hacer algo, así que ella publicó un vídeo de Cinnamon con la esperanza de crear conciencia sobre su situación.
Pronto, después de que el vídeo había sido publicado, se hizo viral. Una cantidad de gente quería adoptar a Cinnamon y no se acababan los deseos de la gente mandándole fuerza y apoyo a Cinnamon.
Sarah estaba especialmente contenta cuando una amiga de ella le contó que le quería dar un hogar para siempre a Cinnamon.
Megan Shelton le dijo a The Dodo: “Los Pitbulls tienen un lugar especial en mi corazón. Yo opino que son unos perros muy malentendidos. Y cuando la vi en este vídeo, literalmente lloré. Mis niños lloraron. Le mostré a mi esposo y él dijo que podíamos ir y mirarla mañana.»
Amistad instantánea
En poco tiempo Cinnamon se hizo muy amiga de Megan. De hecho su colita no paraba de moverse cuando se conocieron.
Sarah captó el momento en vídeo y también lo publicó en su página de Facebook. Desaparecieron las lágrimas de Cinnamon, reemplazadas por una emoción que no podía contener.
La familia Shelton ya tenía un Pitbull de tres años llamado Blu, y el único obstáculo que quedaba era ver si los dos perros podrían aceptarse mutuamente y coexistir.
Pues resulta que Blu y Cinnamon, luego le pusieron el nombre Rosie, se entendieron muy bien. Rosie consiguió una familia amorosa, y los Shelton fueron dotados de un perro especial.
Qué fantástica historia. ¡Estamos tan felices de que Cinnamon/Rosie se le dio la segunda oportunidad por la que estaba tan desesperada!
Todos los perros pueden ser compañeros amorosos si se les da el ambiente adecuado para crecer. Nosotros opinamos que ningún perro debe ser descartado simplemente porque ya no es conveniente.
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