Mucha gente piensa que los gatos y los perros son grandes enemigos y por supuesto que eso a veces puede ser verdad. Sin embargo, la mayoría de las veces es sólo porque no están acostumbrados el uno al otro.
Algunos gatos y perros son mejores amigos y a otros simplemente no parece molestarles la presencia del otro.
En el vídeo de abajo vemos a un pequeño cachorro caer en un hoyo grande…
El pobrecito no puede volver a levantarse por mucho que lo intenta. Una y otra vez cae de nuevo en el hoyo.
Un gato aparece y ve lo que ha pasado. El gato entiende que, a pesar de sus diferencias, tiene que ayudar al cachorro.
Al principio parece que el gato también tiene miedo de quedarse atascado en el hoyo, pero al final el felino toma la decisión correcta.
En un salto seguro, el gato se mete en el hoyo y lo coge con seguridad por el cuello.
Afortunadamente, ambos logran quedar a salvo. Espero que el cachorro se mantenga alejado de los hoyos en el futuro.
Eche un vistazo al vídeo que capturó este inusual rescate.
https://www.youtube.com/watch?v=2JUUDkJpU8o&feature=youtu.be
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