Era un mañana como otra cualquiera, Sarah Simmons estaba sentada en su automóvil y conducía tranquilamente por el bosque. De repente vio cinco caballos a un lado de la carretera. Se comportaban de una manera extraña, como tristes.Cuando se acercó a mirar qué era lo que pasaba se dio cuenta de que al otro lado de la carretera yacía un poni muerto.
Es una trágica historia que demuestra que los animales tienen sentimientos y entre ellos se muestran un enorme amor.
El incidente ocurrió en el parque nacional de Hampshire, al sur de Inglaterra. Allí Sara descubrió el trágico destino de un poni.
El poni se llamaba Hazel y tenía nueve años, había sido atropellado por un conductor y había muerto durante la noche. Pero sus leales amigos se negaban a abandonarlo.
«Es impactante ver cómo de nuevo un poni ha sido atropellado y ha muerto al lado de la carretera en el bosque y que sus amigos están a su lado mirándolo», escribe Sara Simmons en Facebook.
https://www.facebook.com/photo.php?fbid=10159603218770018&set=a.10150709865585018.701797.657025017&type=3
En su publicación sugiere Sara Simmons a todos los conductores ser cautos y conducir con tranquilidad por las carreteras.
«¡REDUCE LA VELOCIDAD CUANDO CONDUCES POR LAS CARRETERAS EN EL BOSQUE! Hay caballos por los alrededores.»
Y continúa:
«A pesar de que había un caballo muerto a un lado de la carretera, y otros cinco permanecían apenados en el lado opuesto de la vía, muchos conductores seguían todavía conduciendo demasiado deprisa».
Cathy Stride, la dueña del caballo comenta a Horse and Hound, que ya es su tercer poni que muere en este tramo por culpa de los conductores.
«La gente conduce demasiado deprisa y le tiene sin cuidado los caballos. Y ha ocurrido incluso que la gente ha conducido por encima de crías de zorro cuando están al lado de la carretera».
Cathy Stride cuenta también que la madre y la hermana de Hazel estuvieron esperando en la carretera toda la noche.
«Su madre permaneció allí un día y medio, cuidándolo. Esta foto muestra como realmente los animales tienen sentimientos»
¡Comparte esta historia con tus amigos para advertir de la conducción en las carreteras!