El perro es el mejor amigo del hombre, la mayoría de las personas los aman de todo corazón. Cuando decidimos que vamos a darle la bienvenida a una mascota nueva a nuestra casa es obvio que va a ser parte de la familia.
Es importante que los perros reciban mucho amor, seguridad y la atención que necesitan.
Esta historia ficticia es una muy buena prueba de eso – muestra que uno nunca debe jugar con la confianza del perro.
Una pareja casada, con tres hijos, tomaron la decisión de adoptar a un perro. Un Golden Retreiver. El perro inmediatamente se volvió el mejor amigo de los niños. Siempre jugaban juntos y se protegían.
El perro era muy inteligente, aprendió trucos muy rápido. Normalmente los niños le enseñaban las cosas nuevas al perro. Era obvio que el perro se sentía muy bien con la familia. Pero después de un tiempo de la adopción el perro empezó con un comportamiento raro: todas las noches el perro estaba sentado afuera del cuarto de los padres.
La madre y el padre acostumbraban dormir con la puerta abierta y pronto se dieron cuenta de que el perro siempre aparecía afuera de su cuarto.
Todas las noches estaban ahí, con sus grandes y oscuros ojos, observándolos. Aparentemente no dormía nada en las noches, pero por la mañana era el primero en saludar al amo y la ama.
Como la familia antes había adoptado a dos perros que nunca se habían comportado se esa forma se preguntaban si algo estaba mal con el perro. Tal vez el perrito quería advertirle a la familia que tal vez estaba enfermo?
Lo llevaron donde el veterinario y pronto supieron que su mascota estaba completamente bien de salud. Entonces decidieron regresar a la casa donde habían adoptado al perro. Tal vez ahí podían encontrar las respuesta del extraño comportamiento por las noches.
El personal del refugio de animales podía tener una explicación – las respuesta le partió el corazón a la familia. La razón era que el dueño anterior una noche de repente había dejado al perro – para que lo pudiera abandonar sin tenerlo que mirar a los ojos. El irresponsable dueño nunca regresó.
El perro no entendía lo que pasaba, ¿dónde se había ido el dueño? Cuando se despertó todo su mundo había cambiado. El perro temía que todas las personas a su alrededor iban a abandonarlo, por eso le daba miedo dormirse por las noches.
Afortunadamente el perro había llegado donde una familia que nunca lo iba a abandonar. Pero el perrito igual seguía con miedo y por eso se quedaba afuera del cuarto de los dueños esperando. Quería asegurarse de que nunca lo fueran a abandonar.
La familia no podía evitar las lágrimas y quedaron muy conmovidos con la historia.
Para ayudarle al perro a confiar en la familia pusieron una canasta de perro al lado de la cama de los padres. Querían mostrar que querían tener al perro cerca y que nunca lo iban a dejar. El perro se tardó tiempo en acostumbrarse a la nueva rutina.
Después de unas semanas el dueño vio que el perro dormía tranquilamente. Desde entonces la mascota ha tenido una vida feliz. Qué suerte que llegó donde una familia que lo trata como un miembro de la familia. Espero que todos los perros tengan la misma suerte en encontrar familias tan lindas y amorosas.
¿Y por qué vas compartir esta historia desgarradora?
Sí, tener mascotas significa mucha responsabilidad, así que antes que compres un perro/gato o lo que sea – pregúntate si tienes el tiempo y la fuerza de cuidarlos. ¡No son juguetes, son animales! Los animales se merecen todo el amor del universo, ¡Ámalos y te prometo que vas a tener un amigo para toda la vida!