No hay nada tan fuerte como el amor de una madre. Y no importa si se trata de personas o animales. Nada le gana al amor maternal.
Eso lo demuestra muy bien esta historia.
Los animales no hablan como los humanos, pero sí se comunican de otra forma.
Ellos se pueden cuidar el uno al otro si es necesario, no importa si son de razas diferentes. Miren a esta perrita y entenderán.
Un dia la mujer jubilada Patricia encontró un gatito abandonado en su granja.
Escuchó un ruido, pero no sabía lo qué era. Lo que pasaba es que había un gatito en la granja, y como hacía tanto frío no tenía la energía para moverse y trataba de hacer rudio para que alguien la ayudara.. Pero entonces llegó el perro Mittens.
Inmediatamente el perro empezó a lamer al gatito para que se calentara otra vez.
Al final se pudieron llevar al gatito adentro a la casa. pero solo tres días después algo increíble iba a ocurrir.
La perrita Mittens había empezado a producir leche y podía alimentar al gatito. El gato sobrevivió y desde Mittens se ha encargado de él desde ese día.
Ella se había convertido en una mamá, pero no madre de un perro, sino de un gatito.
Esto es una historia tan fantástica, casi me pone a llorar.
Mittens actuó con su instinto maternal y gracias a eso la vida del gatito pudo ser salvada,
¡Mitten es un héroe! Comparte este artículo para rendirle homenaje a esta perrita tan adorable!
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