La perrita Molly vivió un infierno con su anterior dueño. Tres veces trató de matarla.
La pobre perrita afortunadamente fue rescatada por una organización que se llama Sidewalk Specials en Sudáfrica. Ellos se encargaron de ella y se encargaron en ayudarle a disfrutar de la vida otra vez.
En el refugio ella se podía sentir segura. Tenía un hogar, no pasaba frío y podía confiar en las personas.
Esto era algo que ella había añorado toda su vida, precisamente como hacen todos los perros.
Afortunadamente fue adoptada por un verdadero animalista que la ama infinitamente.
Mira el video de aquí abajo para ver su transformación, de una perrita deprimida a una perra sana y feliz.
Por favor comparte para desearle buena suerte en la vida a Molly ❤️