Demasiados animales son tratados como si su vida no valiera nada. Por ello siento una alegría especial cuando las personas dedican su vida a ayudar justo a este tipo de animales dándoles una segunda oportunidad.
Un día normal de trabajo de un empleado de la aduana, Marshall Maynards en Brownsville, Texas, se iba a transformar en algo completamente diferente.
En la bolsa había un cachorro de tigre de tres meses, vivo pero inmóvil. Marshall se sorprendió por el descubrimiento. Pero rápidamente se dio cuenta de que necesitaba actuar para salvar la vida de ese animal exótico.
Marshall Maynard trabaja patrullando como empleado de la aduana en Brownsville, Texas. En abril del año pasado, estaba haciendo su turno al lado de Rio Grande – cerca de la frontera con México – cuando detuvo a tres personas que trataban de cruzar el país ilegalmente.
Llevaban consigo una enorme bolsa, que Marshall y sus colegas confiscaron. Ya en el trabajo, Marshalll revisó todas sus pertenencias, en el trabajo, pero esta vez iba a ser muy diferente.
Encontró una cría de tigre
Marshall abrió la bolsa y se encontró con un descubrimiento chocante. Dentro había un cachorro de tigre de tres meses.
El tigre estaba con vida pero no se movía y Marshall supuso que estaba medio dormido. Busco refuerzos para que se llevaran al tigre al hospital de animales más cercano.
La cría estaba moribunda cuando llegó al hospital. Sino hubiera sido por este empleado de aduanas, posiblemente el tigre no hubiera sobrevivido.
«Un efecto devastador»
Los veterinarios consiguieron salvar la vida de la cría de tigre y el Zoo de Gladys Porter se hizo cargo de ella para que con los cuidados necesarios ésta se salvara.
El pequeño tigre se recuperó totalmente y comenzó una nueva vida en el zoo.
El director y veterinario del Zoo Thomas DeMaar comenta que aprovechan la ocasión para enseñar a los visitantes que el comercio con los tigres y otros animales salvajes no es legal y que no deben ser considerados mascotas.
– La gente a veces no comprende que está estrictamente prohibido y que puede tener un efecto devastador si no se protege a los animales salvajes. Estos animales son privados de su hábitat natural para venderse en el mercado negro, comenta DeMaar a Brownsville Herald.
Enviado a una reserva
Después de tres meses en el zoo, estaba claro que el animal debía tener una mejor vida. Como era aún muy pequeño no podía vivir solo en libertad, por lo que se le trasladó a una reserva para similares animales salvajes en Texas. Allí tendrá todo el amor y cuidado que necesita.
Pero sobre todo será libre y se mantendrá lejos del maltrato que ciertas personas pueden hacer a estos maravillosos animales.
Todos los animales se merecen vivir en libertad. ¡Compartes si estás de acuerdo!